Los investigadores descubrieron que cualquier par de usuarios estaba interconectado por una media de 6,6 eslabones.
- La leyenda urbana dice que todos estamos relacionados con cualquier otra
persona del planeta por no más de seis grados de separación.
- "Esta es la primera vez que una red social a escala planetaria ha logrado
validar la teoría de los seis grados de separación", señalaron.
- El estudio, que usó datos de 2006, partió de la base que dos personas se
conocían si habían intercambiado al menos un mensaje de texto.
La leyenda urbana dice que todos estamos relacionados con cualquier
otra persona del planeta por no más de seis grados de separación y
Microsoft acaba de demostrar que es cierto, aunque no son seis grados sino casi siete. Un estudio de Microsoft recogido este lunes por la prensa de EE UU corrobora que dos individuos cualesquiera
están conectados entre sí por no más de 6,6 grados de separación, es
decir, que son necesarios siete o menos intermediarios para
relacionarlos. Para demostrar que a nadie le separan más de siete pasos de
George Clooney o
Angelina Jolie, el gigante del software ha utilizado
30.000 conversaciones electrónicas de 180 millones de usuarios de su servicio de mensajería instantánea Messenger.
Interconexiones entre los seres humanos El estudio, que usó datos de 2006, partió de la base que dos personas se conocían si habían intercambiado
al menos un mensaje de texto.
Los investigadores descubrieron que cualquier par de usuarios estaba
interconectado por una media de 6,6 eslabones, aunque en algunos casos
eran necesarios hasta 29 para relacionar a dos personas. "Esta es la primera vez que una red social a escala planetaria ha logrado
validar la teoría de los seis grados de separación", señalaron Eric Horvitz y Jure Leskovec, responsables del estudio, al diario
'The Washington Post'. Desde
la década de los sesenta, diferentes investigadores han indagado en las
interconexiones entre los seres humanos, intentando demostrar que, en
realidad, la cadena entre un campesino en Camboya y un multimillonario
estadounidense, por ejemplo,
es más corta de lo que parece. Curiosamente, casi todos los estudios llegaron a un número de interconexiones en torno al seis.